sábado, 29 de agosto de 2009

Mi héroe

No niego lo evidente, no niego las ganas que tengo de tenerte aquí a mi lado, la verdad, ¿para qué negarlo? es tan obvio que te necesito, es tan predecible que mis labios llamen a los tuyos, no tan sólo por un beso, si no por tenerte aquí conmigo, es tan evidente que cada noche sueño contigo, con que te acercas y me susurras, te quiero.
Vale, puede que me haga daño a mi misma el pensar en ti, puede que hasta me llegue a destruir por dentro, destruir el corazón que piensa en ti, el que se enamoró de ti... No niego nada, porque sería mentirme a mí misma, mentir a la verdad, y no me gusta mentir.
Ahora mismo puede que no deba estar escribiendo esto, o mucho menos ponerlo aquí, pero es que tú eres la razón de que yo sea así, de que desee tu cuerpo y tu alma cómo nunca había deseado nada antes, eres el culpable, pero también eres el héroe que existe en mí, porque me liberaste de esas grandes barreras que para mí existian, me liberaste de un gran dolor, de una gran amargura.
Vale, no lo has hecho tú todo, porque la verdad es que no has hecho nada para liberarme, tan sólo regalarme una sonrisa, una palabra, una mirada.
Mi héroe, ese ser que sin hacer nada me liberó de esta amargura, mi vida, que ha vuelto a resucitar a esta muerta, ese ser que me desvela todas las noches, ese ser que aparece en mi mente cada mañana, ese que no puedo sacarme de la mente. Te quiero, no lo niego, y cada día te voy queriendo más, es difícil soportar este silencio, es difícil soportar esta soledad, pero con una mirada tuya todo desaparece todo vuelve a la normalidad, tú el ser de mi vida. Tú el héroe de mi libertad.

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